viernes, 25 de febrero de 2022

FORMACIÓN DEL IMPERIO EGIPCIO Y PRIMERAS DINASTÍAS

Los primeros pobladores, las culturas del predinástico 

Las primeras comunidades neolíticas aparecen entre el VI y V milenio a.C. en El Fayum y en el Delta. 

Fayum B es anterior, aunque la primera gran cultura neolítica egipcia fue Fayum A. 

En esta época se cultivan cereales y lino, y se introduce la ganadería de mamíferos. También se vive de las pesca. Suponemos seminómadas. 

En estos milenios llegaban al Valle del Nilo poblaciones de regiones que huían del avance del Sahara. Hasta ese momento, estoas poblaciones habían estado asentadas en wadis. 

En el Alto Egipto se desarrolla la cultura de Badari, cazadores y pescadores que no están completamente sedentarizados. 

A la vez, en el Bajo Egipto, se desarrolla la cultura de Merimdé basada en la agricultura. 

Posteriormente, en el Alto Egipto, encontramos la cultura de Nagada, en tres fases, con una agricultura irrigada, una sociedad sedentarizada y una sociedad estratificada. 

En Nagada II apareen los primeros centros políticos y sus líderes. Su cultura material se basa en la cerámica decorada y tumbas con ajuar funerario. 

En Nagada III, el Alto Egipto y su cultura se fueron extendiendo al Bajo Egipto, donde estaban las culturas del El Omari y Maadi, con las que terminó. 

La expansión también se produjo hasta el sur, terminando con las culturas de Nubia. 

Las razones de este expansionismo y unificación de Egipto, no hay que buscarlas en una sola causa. Se trata de un cúmulo de factores comerciales, demográficos, militares, económicos, etc. Aunque el interés por las utas comerciales parece ser el más importante. 

Durante años, se supuso la anexión del Bajo Egipto por el Alto Egipto, en tiempos de Narmer, aunque hoy se sabe que la unificación se produjo con anterioridad. 

Ya en Nagada III constata una misma cultura material. 

  

La unificación política 

Las razones de la unificación política de Egipto y el nacimiento de un Estado son muy debatidas. 

Actualmente se piensa que pueden no deberse a un solo factor, sino a un cúmulo de los mismos (comercial, demográfico, militar, económico, etc.) aunque tiene especial incidencia el deseo de controlar las rutas comerciales, o la neceada de construir una ideología en torno a unos líderes. 

Se sabe ahora, tras el estudio de la Paleta de Narmer y la situación, que la unificación de Egipto se había producido antes de Egipto se había producido antes de la misma, y que este impulso partió de Hierakómpolis. 

El medio geográfico también condicionó los acontecimientos. 

  

El período tinita: dinastía I, Narmer y sucesores 

La unificación de Egipto fue el resultado de la unión entre diferentes entidades políticas que existieron en Nagada II y de dos realidades geográficas: el Alto y el Bajo Egipto, así como unas estructuras jerárquicas y sociales propias. 

Egipto fue desde el principio, un estado territorial, debiendo elaborar unos símbolos de poder y una religión común a todas las comunidades, que no rechazara sus creencias anteriores. Todo esto ocurrió en las dos primeras dinastías. 

El primer rey de la I dinastía, según las fuentes, fue Narmer, el primero representado con la doble corona, del Alto y Bajo Egipto. El descubrimiento de su paleta llevó a pensar en la conmemoración de la unificación de Egipto, mediante la conquista del Bajo Egipto por parte de Narmer. Pero Egipto estaba unificado al menos desde hacía cien años, y puede que la paleta tenga significado simbólico, o represente algún tipo de expansión en Egipto. 

Le sucedió Aha, también (como el anterior) identificado en el pasado con el mítico Menes. 

Le sucedieron a éste seis reyes y una reina (Merneith), de los que destacamos a Den, por tener más información de él, gracias a la Piedra de Palermo. 

Con él aparecen los títulos de rey del Alto y Bajo Egipto. Durante su reinado las crecidas del Nilo fueron excelentes. 

Fue un gran impulsor de las obras públicas, canales y trabajos de irrigación, templos y tumbas. Se le conoce la primera fiesta Sed (jubileo). 

Respecto a Merneith, probablemente se trató de la primera mujer-faraón y podría haber estado relacionada con Den. 

El final de la I dinastía pudo venir por una situación de tensión. 

    

La II dinastía: de Hotepsekhemuy a Khasekhemuy 

El primer rey de la II dinastía es Hotepsekhemuy (los dos poderes están apaciguados), nombre significativo por la situación del país. Se pierde el nombre de Horus de los serekhs, apareciendo Seth. 

Aunque durante la II dinastía en Egipto tienen numerosas luchas internas, probablemente debidas a la unificación del país y la dificultad por asumir la instauración de un estado unificado. Le sucedieron siete reyes más. 

Uno de los más importantes fue Peribsen, durante cuyo reinado estos enfrentamientos eran más importantes. Unos reinados confusos, en los que la necrópolis se estableció en Saqqara. 

El último rey de la II dinastía fue Khasekhemuy, con el que se volvió a recuperar el nombre de Horus en el serekh, aunque se mantuvo el nombre de Seth. Con este rey se produjo una transición a la III dinastía. 

Durante esta dinastía, la administración estaría muy jerarquizada, y los cargos de más responsabilidad recaían sobre los familiares del rey. El gobierno y la administración venían directamente del palacio, y una de sus prioridades era la construcción de canales para irrigación. 

Respecto a los templos, aún no se conoce mucho, aunque se supone que el rey les haría ofrendas. 

En relación a la política exterior, encontramos representaciones del faraón derrotando a sus enemigos de Egipto. 

  

Características del estado tinita 

Conocemos muy poco de la administración del estado tinita. 

Se trataba de una administración muy jerarquizada, conde los cargos más importantes recaían sobre los allegados al rey. El gobierno y la administración eran controlados directamente por el rey. 

Respecto a la administración provincial, se caracterizaba por la importancia del nomo y del comarca. 

Se excavaban canales de irrigación y se organizaba su conservación. También existían tribunales de justicia. 

 


No hay comentarios:

Publicar un comentario